Asistencia de guía acompañante de habla hispana a su llegada al aeropuerto de Montreal. Salida hacia la Región de Quebec. Cena en ruta. Llegada y alojamiento.

Desayuno buffet. En la mañana descubriremos la ciudad de Quebec, en el transcurso de una visita guiada de temática religiosa. Veremos las bellas iglesias de la ciudad de Quebec, donde la religión ha jugado un papel determinante (las visitas al interior de los templos están sujetas a disponibilidad de acuerdo con los horarios de los actos religiosos) además de disfrutar de otros atractivos de la ciudad. Almuerzo en el restaurante “Les Voutes du Cavourr” en el casco histórico de Quebec. Salida para una excursión en la Côte-de-Beaupré. Parada en la Basílica de Santa Ana de Beaupré, donde se efectuará una visita guiada. El Santuario de Santa Ana de Beaupré es uno de los destinos de peregrinación más antiguos de las Américas y el más antiguo de Canadá. Santa Ana de Beaupré es la Santa Patrona de Québec (proclamada así en 1876). Las primeras iglesias construidas en los terrenos del santuario así como la actual basílica están dedicadas a Santa Ana, la Madre de María, Abuela de Jesús. La historia de Santa Ana está ilustrada en el techo central de la basílica donde se pueden apreciar 26 escenas biográficas basadas en la narrativa de un libro del Siglo II del Evangelio de Saint James (Santiago) Allí se podrá conocer la capilla de la Inmaculada Concepción (consagrada a María), María y a sus padres o parientes, la Capilla del Santo Sacramento, la Tumba del Beato Padre Alfred Rampalon (que fue beatificado el 14 de mayo de 1991 por el Papa Juan Pablo II); La Piedad (una réplica exacta de la escultura de Miguel Ángel que se encuentra en la Basílica de San Pedro en Roma). Más de un millón de peregrinos visitan anualmente este santuario consagrado a Santa Ana, lo que le convierte en el primer lugar de peregrinaje en América del Norte. Regreso a Quebec al final del día. Cena y alojamiento.

Desayuno Buffet. Continuaremos nuestro viaje dirigiéndonos a Trois Rivieres, pasando por Shawanigan, donde disfrutaremos de un crucero en el río Maurice. Almuerzo. Por la tarde, visita guiada del Santuario de Notre-Dame Du Cap. Se trata del tercer lugar en importancia de peregrinación en Quebec, magníficamente emplazado en la ribera del Río San Lorenzo, es el lugar más importante de peregrinación consagrado a la Virgen María en la región. La Basílica de estilo moderno es renombrada por sus vidrieras y su órgano cascavant, uno de los más imponentes de la región. El pequeño santuario construido en 1714 y el parque ajardinado cercano consuman perfectamente el sitio. Construida en forma octagonal. La cúpula en forma piramidal está sobre montada de un lucernario que soporta la cruz. La basílica reposa sobre 195 estacas de cimiento fundidos entre la arena y la arcilla en bloques, para obtener la sólida roca. El granito blanco de los muros viene de San Gerard (Wolfe). La piedra angular se encuentra en la entrada de la basílica en la parte superior de las escaleras, a la izquierda. Las 4 piedras pulidas que están enganchadas en forma de cruz hacen parte de las piedras transportadas sobre el puente de hielo en el mes de marzo de 1879. Ellas fueron bendecidas en Roma por el Papa Pío XII. El campanario tiene un palco de 5 Campanas cada una con su respectiva nota musical: re, fa, sol, la, si bemol. Cena típica en la cabaña de azúcar en Trois Rivieres. Alojamiento.

Desayuno continental. Salida hacia Montreal, la metrópoli de Quebec. Almuerzo. Se realizará una visita guiada de temática religiosa. Montreal es una ciudad cosmopolita donde la herencia francesa y anglosajona conviven desde hace varios siglos. Dominada por el Mont Royal, llamado afectuosamente “la montaña” por los habitantes de Montreal, la ciudad se extiende a través de un archipiélago en medio del río San Lorenzo. Descubriremos el casco antiguo de Montreal con sus casas de los mercaderes, la prestigiosa calle Sherbrooke detrás de la cual se yerguen las altas torres de cristal y acero del centro, además de la Basílica de Notre Dame, situada en el distrito de Ville-Marie, es la iglesia-madre de Montreal. Auténtica galería de arte religioso, la riqueza de sus adornos no tiene equivalente en Montreal. Está Basílica constituye uno de los más preciados patrimonios religiosos de Quebec. El interior presenta piezas de arte maravillosas. Los cristales interiores muestran escenas de la historia de la ciudad y el órgano es uno de los más grandes del mundo con miles de tubos. Visita del Oratorio de San José. Constituye uno de los lugares de peregrinación más transitados del mundo. El Oratorio de San José es una gran basílica con una cúpula de cobre gigante construida en honor a San José, patrono de Canadá. El enorme edificio en lo alto de las laderas de Mount Royale en Montreal. Sus orígenes simples se remontan al sueño de un humilde hermano lego llamado Hermano André. Su sueño era construir un gran santuario a San José lo que se convirtió en realidad en 1955, cuando la actual basílica fue terminada. El hermano André fue enterrado en la basílica. Fue beatificado (declarado “beato”), un estado un paso por debajo de la santidad, el Papa Juan Pablo II en 1982, y canonizado por el Papa Benedicto XVI el 17 de octubre del 2010. André había amado durante toda su vida y todavía se recuerda hoy en día por su vida de fe simple, la oración continua y la bondad inagotable. Cuando murió, en 1937, un millón de personas desfilaron ante su ataúd a pesar del frío invierno. La majestuosa estructura culmina en la cúpula a 97 metros (la segunda en altura tras la de San Pedro en Roma). Constituido por una capilla primitiva, de una capilla votiva, de una cripta, de una basílica, el santuario consagrado a San José encierra varias reliquias del bienaventurado y ex voto de peregrinos curados milagrosamente. Sus grandiosos órganos y su carrillón de 52 campanas hacen, cuando la ocasión se presenta, revivir con solemnidad las obras de los grandes compositores. Cena y alojamiento.

Desayuno Buffet. Salida hacia Ottawa. Almuerzo en ruta. Llegada a Ottawa, fue designada capital de Canadá en el siglo XIX por la reina Victoria de Inglaterra. Es una ciudad llena de historia, lo que atrae a muchos visitantes. Son muchos los atractivos que nos ofrece, destacan entre otros la calle Wellington y sus edificios oficiales, el Parlamento de Canadá de estilo neogótico que corona la torre de la paz, el paseo Sussex donde se encuentran las residencias oficiales del Primer Ministro, del Gobernador, a los que se suman algunas embajadas, los grandes museos nacionales, la plaza de la confederación, el barrio animado del mercado. También la Basílica Catedral, nuestra Señora de Ottawa (incluimos una visita guiada al interior de acuerdo a disponibilidad horaria). Cena y alojamiento.

Desayuno Buffet. Partida en dirección a la región de Mil Islas, incomparable conjunto de pequeñas islas que encuadran el nacimiento del río San Lorenzo, recorriendo la costa este del Lago Ontario, uno de los cinco grandes Lagos de América del Norte, aunque constituye el más pequeño de ellos. Llegada y a continuación efectuaremos un crucero, déjese seducir por las numerosas islas e islotes del archipiélago muy estimado por los viajeros desde hace décadas. Almuerzo en la región. Proseguiremos nuestro viaje a Toronto, llegada, cena y alojamiento.

Desayuno Buffet. Salida hacia las Cataratas del Niágara. Excursión a bordo del Maid of the Mist, (túneles escénicos, según temporada) este barco le acerca al pie de las cataratas en el lado canadiense y conocidas como las herraduras; es una experiencia fascinante que no se puede dejar de recordar. Almuerzo en el restaurante Crowne Plaza con vistas panorámicas sobre las cataratas. Le proponemos opcionalmente sobrevolar las cataratas en helicóptero y también puede asistir a la proyección de una película que narra la historia de las Cataratas. Regreso a Toronto con parada en el pueblo Niagara-on-the-lake, pequeña ciudad con encanto cuya arquitectura data del siglo XIX, es una de las mejores conservadas en la región. Situada en la desembocadura del río Niágara y el lago Ontario. Fue la primera capital del Alto-Canadá. A su llegada a Toronto se realizará una visita de orientación de la ciudad reina. Además de haber acumulado toda clase de records, entre los cuales destacan el de poseer la más alta estructura autoportante del planeta y la calle más larga del mundo, Toronto ofrece el espectáculo de una gran ciudad norteamericana siempre en ebullición y con toda clase de actividades. Podrá ver los rascacielos del corazón financiero de Canadá, el muy británico campus de la universidad, el impresionante Sky Dome donde se dan toda clase de actividades deportivas, el bar rio de los teatros, la Torre CN que alcanza los 553 metros (subida a la Torre opcional). Cena y alojamiento.

Desayuno Bufet. Tiempo libre, a la hora indicada traslado al aeropuerto para salir en vuelo de regreso a su ciudad de origen.